A propósito de las últimas clases de Filosofía y Antropología, esencialmente la clase de Filosofía dedicada al video sobre el soberano que moldeaba a sus súbditos para no tener que adaptarse a los demás… He cavilado sobre la manipulación de masas porque es obvio que es un hecho real y que nos afecta a todos por igual.
Eso nos llevaría a pensar “Ah, pero yo no hago todo lo que me dicen.” ¿Y qué?
Las series nos infunden ideas… Los anuncios promueven el consumismo… De una manera u otra, todos los medios de comunicación nos intentan manipular. Quizá algunos con mejores finalidades que otros, pero es una forma de manipulación indirecta. Igual que la moda, o las tendencias… Nos intentan inculcar modos de vida y fomentar el egocentrismo de las nuevas generaciones.
Claramente, luego nos parece absurdo pensar en medidas económicas austeras en las que la persona, como individual, no sale beneficiado. Aun que en parte, igual de absurdo es hablar de recortes en una sociedad basada en el bienestar social. Lo que no quiere decir que todas las medidas (actuales o no actuales) dedicadas a la austeridad estén bien y las quejas mal, algunas son exageradas y contraproducentes…
Eso me hizo pensar el debate político televisado por la TVG2, de Feijoo y Pachi Vázquez; aunque es posible que ni Dios en su omnipresencia dedicara ni un minuto de su eterna existencia a presenciar la guerra verbal de unos de los candidatos a dirigir el gobierno autonómico gallego, yo estaba lo suficientemente aburrida como para que esta supuesta guerra pudiera parecerme entretenida, y además me ayudó a darme cuenta de más métodos de manipulación indirecta.
Es obvia la estrategia, llamar la atención y potenciar el egocentrismo de los votantes.
Con potenciar el egocentrismo de los votantes, me refiero a lo mismo de antes… Vivimos en un estado de bienestar donde el individuo es lo más importante y ofrecer un bienestar mayor para el individuo es obvio que aumentará las probabilidades de que le tenga más en cuenta para las elecciones. Paralelamente a esto… Llamar la atención no es menos obvio, la mayoría absoluta de los votantes son gentes que solo se fijan en las apariencias externas y el significado literal de la frase, no se paran a analizar los comportamientos. También se fijarán en quien parece llevar la delantera en las pullas y quien se queda sin recursos o reproches.
Después de ver este debate, quizá es solo mi impresión o otro tipo de manipulación; que el comportamiento de Pachi Vázquez era prácticamente igual al de Rubalcaba en los debates por la presidencia con Rajoy.
Los candidatos del PSOE actúan a la defensiva, ridiculizando las palabras de los otros candidatos y burlando las acciones de los otros. De la misma manera, en el caso de Rajoy el actual presidente solía llevar el debate con paciencia… Sin embargo, Feijoo devolvía las pullas como estuvieran en el mismísimo circo romano.
Lo que más me había resaltado en el debate por la candidatura gallega fue que Pachi Vázquez no respetaba los turnos de palabra. No pude si no reír ante la poca paciencia del político, y pensar si realmente estaba mal que esos mismos políticos que tienen la educación de un adolescente de secundaria que corta la palabra a los demás, son los considerados a cargo de nuestro país.
Aunque está claro que no viene a cuento, es solo una pequeña reflexión personal.
De una forma u otra todos tenemos derecho a ser mejores en unas cosas que en otras y a errar de vez en cuando, ni todos los políticos son perfectos ni lo son otras personas. Aun que quizá no estaría de más tener un poco de respeto por el turno de palabra… Se supone que la educación y el respeto te lo enseñan desde primaria, si no incluimos la educación paterna.
Pero eso todo da igual, el mundo se rige por esas tonterías y está claro que de un día para otro nadie va a cambiar esas costumbres.
El mundo es, en efecto, un saco de ciegos… Donde mandan los sordos.
Hello troll! 